Así que... ¡Vaya, señor Gradenko! ¿Qué se siente ser capturado al fin por simples seres humanos? El telépata y psicoquinético más poderoso de la Historia se mantuvo inalterable, aún con las esposas y el casco inhibidor puestos. - Bien, señor Gradenko, en su posición, estaría dispuesto a confesar de qué se trataba su pequeña reunión, ¿algún otro atentado? ¿un robo o "borrado" de algún personaje importante? - Inspector Vidocq, si puso atención en la redada, se habrá dado cuenta de que había tanto "chicos buenos" como "chicos malos". Los mayores poderes mentales de este lado de la Galaxia. Y estábamos en un trabajo voluntario. - ¡Vaya! ¿Ahora tiene un lado noble? - No exactamente, inspector; para los "buenos" es noble, ciertamente; para los malos, es negocio: posibles víctimas a futuro. Además, es bueno ante la prensa: digamos que un personaje proyecta rayos a su oponente; nos aseguramos de que sólo le atine a su objetivo y no a un departamento con una familia adentro. Superseres responsables de sus batallas y todos felices. - ¿Y cree usted que me voy a tragar ese cuento? ¡Diga la verdad! - Francamente, me importa un comino lo que usted piense, inspector Vidocq. Quiero decir, usted piensa que realmente me encuentro en este cuarto, platicando... y, lo que es más, piensa que este dispositivo en mi cabeza realmente inhibe mis poderes. ¿Me tiene preso o le estoy haciendo pensar que me ha atrapado?